lunes, 26 de noviembre de 2012

Pobre Soneto en inútil intento de contener el dolor.



Tú me dueles sin tregua y silencioso,
desde el pecho subes a la garganta
aplastando el aire como una manta
que deja un sentimiento doloroso.

Y me duele este amor harto insidioso
tanto como un “amor” tuyo me espanta
cuando al oído, suave, tu voz me canta,
convirtiéndote así en lo más precioso.

Tú que has sido dueño de mis desvelos
de mediocres poemas inspiración,
de mi corazón hacedor de vuelos,

sin entender, sólo por desesperación
en un intento de contener el duelo
te dedicaré mi última oración.


No rezaré a los Dioses que no me escuchan porque no les doy forma en mi mente, calor en mi corazón, ni hueco en mi vida, lo haré por y para tí por selo todo.
Todos y cada uno de esos Susurros de Tinta que llevaban tu nombre, todos y cada uno de los sueños que nunca dejaron de ser sólo eso, todos y cada uno de los latidos de este corazón que ya no pude creer en ti, se convirtieron en dolor, dolor que he encerrado en un Soneto, el primero que escribo, el último que lleva tu nombre entre renglones, encadenado en la métrica lo tiraré al fondo del más profundo de mis oceanos y a la vez que se vaya desdibujando te irás borrando de mí, palabra de sirena y si algo me conoces, bien sabes que siempre cumplo mi palabra.


martes, 20 de noviembre de 2012

Volverá a llover...



Mira por la ventana como el cielo se va oscureciendo, “volverá a llover”, piensa y la tristeza le inunda como un mar al que mira la luna llena al subir la marea, no entiende su tristeza, no debería tener motivo, solo sabe que cuando no entiende las cosas le falta información, pero no sabe cuales son las preguntas que ha de hacer para obtener respuestas. Se siente a veces tan vieja como el mismo mar, a veces demasiado niña, inocente y terriblemente estúpida y se ríe de si misma y se repite una vez más “que ya no tienes edad para ser tan imbécil”, oculta su rostro entre las manos bajando la cabeza en un gesto de vergüenza absoluta, luego vuelve a mirar por la ventana y piensa “volverá a llover”.