Esta sirena ya pensaba que su alma era como el horizonte, siempre equidistante, si me acercaba a ella se alejaba, si me alejaba de ella me seguía con los mismos pasos.
¿Cómo explicar que sin alma no se puede susurrar en tinta
caricias de papel?, ¿cómo contar sin palabras que el vacío del alma deja sin
voz a esta sirena?.
Pero mira tú por donde que este fin de semana unos duendes invadieron
Sevilla de alegría, ¡que arte mi arma!, me han llenado los bolsillos de besos y
abrazos, el corazón de latidos de todos los colores y han conseguido vaciar ese
mar que me ahogaba por dentro al desbordarlo por las pestañas de risa, de
emoción, de un montón de sensaciones indescriptibles e imposible de definir,
solo los latidos las perfilan y como no, de tristeza al despedirlos.
A esos duendes que han invadido Sevilla,¡ gracias!, algunos lo
han hecho con su presencia física y otros desde su corazón que estaba entre
nosotros y me han devuelto el alma, aquí me tenéis de nuevo, los dedos desparramados
sobre las teclas, las musas volando y
alborotando a mi alrededor bien alimentadas, ( ya sabéis que se alimentan de
emociones, ¿verdad?) y diciendo una vez
y otra, “que arte mi arma”, con la de gente que hay en el mundo, tener la
suerte de haber encontrado estos duendes jueveros que siempre me rescatan.
Os quiero con toda mi alma, si, esa que por fin se ha dado
de bruces conmigo y mírala ella que "a gustito" y que contenta ha vuelto a
instalarse en su casa, ¡pero que arte mi arma, que arte!.
El resto de jueveros, de amigos, de duendes en casa de nuestra Matices...
El resto de jueveros, de amigos, de duendes en casa de nuestra Matices...
Sirenita... te ha costado pero ya estas aquí de nuevo y los duendecillos al final cumplieron su objetivo ¿para quedarte?
ResponderEliminarEspero que si
Besos!!
Me hubiese encantado haber podido compartir con todos ustedes!...y hasta hora ni he visto una sola foto...y eso que lo he pedido!
ResponderEliminar=)
es que no tengo face =(
es muy emotivo, por ahí anda el duende del sentimiento juevero, se siente.
ResponderEliminarY que bien que te hayan inspirado para regalarnos tu arte, mi alma.
Un abrazo :)
Sirena me han encantado lo que has escrito, pero con un valor añadido y es que a esos duendes también los he conocido yo. En parte sé de que estabas hablando. Por otra parte me alegro de tus letras te vuelvan. No te quiero ver en silencio. Siempre demostrando que estás aquí. Un beso muy fuerte.
ResponderEliminarNada me alegra más que verte desparramar tu arte "mi arma" que ultimamente nos ocultabas entre sollozoz y algún que otro devarñio marinero. Tus achuchones han sido de lo mejor de sSevilla, me siento llena y eso te lo debo en parte a ti, sirenita de "mi arma"
ResponderEliminarUn beso
Me alegra que te hayan rescatado los jueveros de Sevilla porque así he tenido la oportunidad de conocerte. Encantada.
ResponderEliminarNo es que sólo seas guapa, arrolladoramente simpática, si no que además cuando se te desborda el alma, resultas irresistible. (Tomayá)
ResponderEliminarUn abrazo saladito
Me gustaría repetir las palabras de Rosa, porque estoy totalmente de acuerdo con ella, así que pondré algo de mi cosecha, pero que cosa más bonitaaaaaaaaaaaaa has escrito, ha sido muy lindo ser duende acompañada de una sirena fotógrafa ;) y asaltar Sevilla ha sido todo un lujo.
ResponderEliminarUn abrazo apretao
Espero que esta sirena no deje de escribir y participar en los jueves. Los momentos vividos en Sevilla siempre quedarán en nuestra memoria. Me alegro de que las musas te visiten. ¡Y espero que se queden! Un beso, guapetona.
ResponderEliminarHola Susu, yo soy de los que estaban de corazón. Pero al ver lo que has escrito, me muero de envidia por no haber estado allí. Estoy con la gente que te pide que sigas escribiendo.
ResponderEliminarUn beso (De momento B/N)
Si el encontrarnos ha servido para traerte a la orilla, pues nada, que no nos falten los encuentros, asi te tendremos siempre a nuestra vera.
ResponderEliminarEsta morenaza tiene arte hasta en los andares.
Un abrazo grande, grande.
Me encanta formar parte del grupo de duendes que ha pasado por Sevilla a devolverte las palabras. Sigue desparramando tus dedos por el teclado y haznos disfrutar de tu arte, que es mucho "miarma".
ResponderEliminarBesos
Ay, Susu!!
ResponderEliminarQué arte hay que tener para tomar café cuando las doce estaban dando, tu melena sin secar, los Jueveros esperándote y tú con el estrés. Esos helados con cucurucho de galleta y nuestro café...
Un beso arma mía!!!
Olé, niña mía ¿Cómo voy a comerme esos helados a la orilla del mar si no estás tú empujándome a ello con tanto cariño?
ResponderEliminarTodos te queremos, y mucho.
Un beso.
Esos milagros solo se dan en Sevilla y con personas como las que asistieron.
ResponderEliminarEs la enésima vez que hoy escribo la palabra envividia.
Un abrazo.
Que gusto volver a leerte.
ResponderEliminarMe llamó la atención eso de las musas revoloteando y que se alimenten de emociones. Tiene sentido.
Susus, Sirenita, Mª José, tocaya. Tan sólo por volver a leerte, ya daría por bien empleado ese viaje a Sevilla, si además tuve la fortuna de abrazarte, pasear contigo, reirnos juntos, etc. etc. etc, solo puedo mostrarte mi agradecimiento por lo mucho que nos has dado en tan sólo dos días. Bienvenida de nuevo a la orilla de las palabras de donde no me gustaría que emigraras nunca, pues es tu orilla natural.
ResponderEliminarUn besazo, reina.
eh... que tengo un rebujito pendiente con todos los jueveros
ResponderEliminarSolo tu eres capaz de contar una visita como un relato. En realidad me recuerdas a un poeta español al que pidieron que escribiera un soneto y explicando que no podria lo fue escribiendo. Estoy en mi vena vaga y no recuerdo su nombre. Jeje.
ResponderEliminarUn abrazo.
..... y me alegro de verte de vuelta.