El viento juega al escondite entre tus dedos, hace filigranas en tus manos que se llevan mi mirada en cada uno de sus movimientos.
El viento se estrella mimoso contra tu pecho, rebota y regresa a mí trayéndome el sonido de tus latidos, ¿o son los míos?.
El viento hace pacto con tus cuerdas vocales para arrancarte risas cantarinas o sólo las roza para crear tu voz hermosa, que me conquista en un susurro suave.
El viento roba el aroma de tu cuello y me lo trae sin pedirlo y elevo los ojos al cielo y pido:
-Eolo, ¡oh Dios!, ata el viento por favor, al menos cuando él esté cerca de esta sirena.
El viento, cógelo amor y enrédalo en mi pelo y que no se mueva, porque si vuelve a rozar tan solo uno de tus cabellos, me perderé, me disolveré, desapareceré como el viento al rozar tu piel.
Los demás compañeros donde mi querido Juan Carlos
el viento me atrae ese olor peculiar de tu piel cubierta de sal y arena, cada mañana por la ventana donde asoman las gaviotas y las olas revientan, la brisa del mar me vuelve a engañar mientras te busco entre estas sábanas ajenas....
ResponderEliminarPor lo que veo, el viento se convierte en una fuente inagotable de irresistibles tentaciones, así que comprendo tu súplica por tenerlo calmado y sofocado.
ResponderEliminarUn abrazo.
Destaco que hay dos clases de sirenas, las más conocidas, las acuaticas, en ingles mermaids. Y las mitologicas, las de la Odisea, aladas, que en ingles son llamadas sirens.
ResponderEliminarAmbas pueden jugar con el viento.
Me encanta tu relato romántico. Un beso.
ResponderEliminar¡Sublime relato, compañera! He de decir que gracias a ti he descubierto una fuente inagotable de secretos e iguales: ¡es como sentirse en casa!
ResponderEliminar¡Feliz día del viento... o lo queda de él! ;3
Pura poesía sobre el viento y sus juegos amorosos.
ResponderEliminar¡qué mágico el viento que logra ser inspirador de tan bellos versos!
ResponderEliminar=)
Que bello, sutil, suave y mágico siiii me ha encantado... MILLL FELICITACIONES MI QUERIDA SUSUS TE PASASTE
ResponderEliminarEl viento si es galerna no gusta a las sirenitas, la brisa es otra cosa, salada, yodada en la piel, en las escamas. Esos cabellos ondulados, esas algas agitadas...
ResponderEliminarEncuentro cuerpos a merced de los vientos seductores. Me ha encantado, besitos muchos.
Simple y llanamente: el poder del viento... o el poder de la pasión que nos conmueve ante todo estímulo arrasándonos?
ResponderEliminarTus letras se han movilizado bajo su influjo, sin dudas!
Besos... sin que el viento se los lleve!
Gaby*
Un viento con personalidad, que con sólo rozar la piel lo puede cambiar todo.
ResponderEliminarGran influjo son tus palabras
Un abrazo
Amarrar al viento... sujetar al mar...sirena mia, no se piden imposibles.
ResponderEliminarAiinnnsssss cuanto amor es ese.
Un abrazo
El viento trae tentaciones, aromas, sensaciones que no se pueden resistir. El viento trae y lleva, no dejes que se escape semejante fuente de placer.
ResponderEliminarUn beso.
Muy poético tu jueves ventoso, sirena!
ResponderEliminarMuchos besos!
El viento juega, que pena no poder participar... Por esta vez :)
ResponderEliminarSaludos!
Hola Susus, llego a mi paso pausado para comprobar que has jugado estupendamente con el viento, que en relato juega contigo, pero ¿es el viento? o esas sensaciones se trasmitirían también su su ayuda.
ResponderEliminarMuchos besos, querida amiga.
Un viento romántico, jugueton, apasionado, que desparrama frases poéticas, bellas e intensas.
ResponderEliminarMuy bueno, sirena, muy bueno!!!
Nos estamos viendo y abrazando!!!
¡Cuánto sentimiento nos trae esta dulce sirena en un jueves ventoso! ¡ya mismo nos vemos! :) Un beso.
ResponderEliminarViento caprichoso y zalamero, que acerca y aleja nuestros deseos a capricho. Muy bonito. Un besazo
ResponderEliminarEste viento es un poco irresistible, no? :)
ResponderEliminarBesos!!!
los vientos en zamora, susus, han debido de estar calmos estos días, por que si no, no se entiende que yo haya tardado tanto en venir a ver los vientos estos tuyos atados en versos que se acabarán atando, enredando entre tus cabellos de andaluza pilla y que se acabarán confundiendo entre...
ResponderEliminarpor que no has escrito un texto. ¿lo sabes, verdad? has escrito un bello poema alocado como el viento, repetitivo como el viento, ululante como algún beso que se haya quedado a medio camino, amoroso como el mismo viento durmiente y mojado de un "ay, quién fuera ese viento que acabo de leer"
medio beso, media esposa.
Y el, tan escueto siempre dijo: ¡Dios, quien fuera viento!
ResponderEliminarUn abrazo.
Y la divinidad hermosa llamada La'a Maomao sopló y nos ofreció aromas y perdones a los sacrílegos, a aquellos que desafiamos el viento tras una roca, tras una esquina o tras un corazón herido...
ResponderEliminarBeso, mi sardinita.
trae y lleva los besos
ResponderEliminarQueee bonito!!! ^-^
ResponderEliminarmuk muk
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